NO ME DIGAS “TE QUIERO”
"Te quiero”, dos palabras,
ocho letras, mucho significado en su interior. Es muy sencillo pronunciar
estas pocas letras, pero.... ¿sabemos realmente cuando y por qué decirlo?
Desde mi punto de vista, a estas
alturas de la evolución humana, en la mayoría de las ocasiones son
pronunciadas sin sentimiento, sin haberse parado a pensar que puede
entender, y sobre todo sentir, la persona a quien se le dedican.
Se ha convertido en una frase
más, en una coletilla especial, en algo insulso.
Pues bien, yo reivindico su buen
usó, reivindico su carga de sentimiento, sus mensajes ocultos, su
alegría, su sonoridad, reivindico la desnudez del corazón cuando se
pronuncien.
A menudo se dice "te quiero
" cuando realmente se piensa en "te deseo".
Mezclamos sentimiento con
instinto, y no, no señores/as, no es lo mismo, el deseo nace de nuestra
necesidad ancestral de perpetuar la especie, no es más que algo pasajero,
temporal, con fecha de caducidad, un impulso carnal que nos invita a
relacionarnos con otros y a hacer todo lo posible por lograr ese objetivo,
incluso engañando a la pareja de turno si fuere menester.
Querer, señores/as, es otra
cosa, implica sentimiento, nace del interior, de ese interior más
irracional, de ese que no entendemos, de ese que no figura en ningún libro,
nace del alma, vive en el alma, duele en el alma, y con ella muere.
En ocho letras resumimos muchas
frases cargadas de sentimiento, de emoción, de amor y respeto, de
admiración y comprensión, de perdón y disculpa, de "no te alejes”,
"te extraño”, de muchos "te necesito, aunque puedo solo/a".
Decimos TE QUIERO cuando lo
que sentimos es un TE AMO, pero no nos atrevemos al compromiso de pronunciarlo,
recurrimos a la coletilla fácil, esa que hemos aprendido de pequeños y que
hemos pronunciado sin ni siquiera saber que significa QUERER.
Suena estos días un tema que dice
algo así " no me digas que me quieres, quiéreme", pues eso
señores/as no digan "te quiero " cuando quieran decir otra cosa.
Hablamos y escribimos en un
idioma muy rico en términos, tenemos muchas formas y palabras para
expresarnos con claridad y distinguir entre los distintos grados y tipos
de amor, y además distinguir estos del mero deseo.
Que cuando de nuestros
labios broten estas ocho letras sea para dejar frases incompletas, frase del
tipo ... Te quiero hacer feliz .... Quiero envejecer a tu lado....
Hemos contestado a ¿por qué?,
pero se nos quedaba el ¿Cuándo?, esta es más sencilla, la respuesta es NUNCA y SIEMPRE...
nunca digamos "te quiero" con la única excusa de regalar el oído a
quien nos escucha y digámoslo siempre que nos salga del corazón,
del alma.
C. Rodríguez
6/09/2017
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