viernes, 9 de marzo de 2018

Terapia intensiva

Que extraña se me hace esta sensación,  esta rara necesidad, cuando pienso que hace tan sólo unos meses ni tan siquiera me habría planteado el tema, cuando ni por la imaginación se me hubiese pasado, y ahora me encuentro  con esta especie de "mono", con esta necesidad de escribir, con la irracional angustia del que quiere y no puede.
Mi cabeza sigue viajando, mi corazón parece haber decidido independizarse y no responder a los ya poco cuerdos mandatos de las neuronas, mis dedos navegan a la deriva entre una y el otro, sin saber a cual de ellos hacer caso, y temo que no tarden en amotinarse y comenzar a escribir por libre.
Mi Musa de la inspiración dice que es hora de cambiar de tema, que no puedo seguir con el mismo tema, que es hora de afrontar nuevos retos,  pero ... ¿sobre que escribir?    La política y el fútbol generan conflicto de pasiones encontradas entre los posibles lectores,  además de ser temas ya muy trillados en las charlas de cafetería, el sexo y la religión son temas profundos que requieren de un espacio mayor  de debate (incluso diría que de debate cara a cara) por ello sigo escribiendo sobre la vida y los sentimientos, temáticas que no suelen generar polémica y si permiten el diálogo intercambio de opiniones, pues nada más diferente e igual para todos, que la propia experiencia en la vida y nada más dispar que los sentimientos de cada cual.
No se trata hoy de filosofar sobre esto, hoy sólo intento acallar las ganas de escribir, sólo se trata de autoinyectarme  una dosis de tinta no impresa que calme ese ansia que ya comienza a  asustarme, y que por otro lado tan buenos  momentos me aporta.
Ahora que lo he probado,  no puedo hacer otra cosa que  recomendaros explorar este lado del texto, que os animeis a plasmar por escrito vuestras ínquietudes,  vuestros sentimientos,  vuestros miedos, etc.  Como ya habréis visto,  yo no estoy precisamente muy ducho en esto, pero como terapia económica es una maravilla  ... jejeje.
Ya os habréis dado cuenta que pasó días, incluso semanas, sin subir nada, pero eso no significa que no este escribiendo, es tan sólo que olvido pasarlo a este espacio, supongo que los años no perdonan, y mi memoria ya no es la de antes. Para compensar estos lapsos, luego subo varios juntos

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